5 consejos para preparar fritos sin quemarte o destruir la cocina

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1. Elimina la humedad de los alimentos

Todo sabemos que el agua y el aceite no se mezclan. Por eso, es importante que los alimentos que vayas a freír tengan la menor cantidad de agua para evitar llamaradas.

Con una toalla de cocina seca el exceso de humedad de tu comida antes de que vayan a la olla (Bonilla, 2015).

Si vas a freír alimentos congelados, quítales el exceso de hielo y llévalos directamente al aceite muy caliente (180 °C aproximadamente).

Esto no solo evita que comiencen a gotear, lo que crearía llamas al entrar en contacto con el aceite, sino que también asegura una buena cocción.

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2. ¿Cómo evitar salpicaduras en tus fritos?

Antes de agregar tus empanadas, milanesas, o lo que más te guste freír, agrega al aceite caliente una cucharada de harina de trigo.

Cuando se forme en el fondo del sartén una capa de harina, añade poco a poco los alimentos. ¡Despídete de esas gotas de aceite peligrosas! (La Vanguardia, 2020).

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3. Usa una rejilla antisalpicaduras

Poner una tapa en el sartén mientras fríes sería lo más común, pero el calor genera condensación (goticas de agua) lo que haría que el aceite salte y deterioraría su calidad (Mollejo, 2019).

Por tanto, es mejor usar una rejilla o pantalla antisalpicaduras de grasa para protegerte de las quemaduras y evitar ensuciar toda la cocina.

Estas rejillas o pantallas las consigues en los supermercados o en tiendas para utensilios de cocina.

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4. La temperatura adecuada del aceite para tus fritos

Ni tan frío que haga que tus alimentos absorban mucho aceite, ni tan caliente que genere humo, lo que no es tan saludable.

El punto de humo es la temperatura en que el aceite comienza a ahumar y a descomponerse, haciendo que pierda su valor nutricional (Zeratsky, 2019).

Si no tienes termómetro, una manera para saber que el aceite está en el punto adecuado es ponerlo a calentar a fuego medio.

Cuando notes pequeñas ondas en la superficie agrega un trozo de pan.

Si alrededor del pan salen burbujas y se torna dorado, el aceite ya está listo para tus fritos (Aymerich, 2019).

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5. Agrega poco a poco los alimentos

Cuando vas a freír varias piezas, como es el caso de las papas fritas, agrégalas poco a poco.

Esto es para que el aceite no pierda calor al entrar en contacto con la temperatura del alimento que estás incorporando.

Y recuerda hacerlo con suavidad y lo más cerca que puedas del aceite, así evitarás salpicaduras (Aymerich, 2019).

A la hora de cocinar siempre debes estar muy alerta, de esa manera evitas accidentes.

Sigue estas recomendaciones y fríe tus comidas sin problema.

Al terminar de preparar tus fritos, es muy importante que lo deseches de la manera adecuada, así contribuyes con la protección del medio ambiente.